Comentarios de Unidad 3. Ganar en Salud. Un enfoque positivo de atención a la cronicidad
Lectura 4: "Desigualdades sociales. Hábitos de alimentación y de actividad física, en Andalucía"
Un ejemplo de cómo se producen las desigualdades lo tenemos en un estudio sobre mortalidad en varones, realizado en Inglaterra. Este estudio mostró que los hombres desempleados presentaban unas tasas de mortalidad muy superiores a los que tenían trabajo, y que estas diferencias se producían en todas las clases sociales.
La Encuesta Andaluza de Salud del 2011 nos ofrece datos más cercanos y relacionados con hábitos de alimentación y actividad física en población adulta:
- El 48,3% no sigue las recomendaciones de consumo de frutas a diario.
- El 75,7% no consume verduras a diario.
- El 47% se declara sedentario en su tiempo libre.
- El 39,5% está en sobrepeso y el 13,4 % en Obesidad
Sin embargo, estos datos representan a la media del conjunto de nuestra población, y los promedios esconden las desigualdades. Cuando estratificamos los datos según variables socioeconómicas vemos que algunos grupos presentan cifras más altas que otros:
- Las personas con menor nivel de estudios y menores ingresos económicos familiares presentan porcentajes más altos de sedentarismo que las personas de mayor nivel educativo y más ingresos económicos. También mostraron una clara diferencia entre aquellas que consideran que en su barrio hay suficientes espacios verdes con respecto a aquellos que manifestaron que carecían de ellos.
- Las mujeres suelen consumir más fruta y verdura a diario que los varones, aunque también son más sedentarias en su tiempo libre.
- Existen diferencias importantes en las tasas entre provincias y hábitat: los municipios más pequeños declaran consumir más fruta y hacer más actividad física que aquellos con mayor población.
- El sobrepeso es más frecuente en los varones y la obesidad algo más en las mujeres. El exceso de peso (sobrepeso + obesidad) es más frecuente en las personas con menor nivel de renta mensual, siendo la obesidad claramente más frecuente en las que tienen menor nivel de estudios.
Otras fuentes muestran que la población gitana presenta mayores tasas de sobrepeso y peores hábitos de alimentación que la población general.
La siguiente imagen puede servir para ilustrar las diferentes condiciones de posibilidad a la hora de hacer ejercicio físico en dos grupos poblacionales diferentes. Ante esta imagen cabe preguntarse aspectos como: acceso a instalaciones deportivas, percepción de seguridad del medio (físico y social), valor que se da al deporte en cada grupo, etc. Y si la prevalencia de factores de riesgo, enfermedades crónicas, comorbilidad, agravamiento de las complicaciones, etc serán iguales.