¿Cuánto cuestan las enfermedades crónicas más prevalentes?

Enfermedades Cardiovasculares

Las cardiopatías fueron la enfermedad crónica más costosa en USA en el año 2003, alcanzando un total de 65 billones de dolares¹. En Europa el problema las enfermedades cardiovasculares también supusieron un grave problema de salud, y casi el 20% de de todos los días de ingreso hospitalario son consumidos por enfermedades cardiovasculare[24]. Los costes directos e indirectos de las enfermedades cardiovasculares en USA se estiman para 2008 en 448,5 billones de dólares. Esta cifra incluye los costes de salud (costes directos, incluyendo los costes de médicos y otros profesionales, hospitalización, y servicios de residencia de cuidados, medicaciones, cuidados sanitarios domiciliarios, y otros gastos médicos) y la pérdida de productividad como consecuencia de la morbilidad y mortalidad (costes indirectos). En comparación, en 2007 los costes del cáncer y tumores benignos fue de 219 billones de dólares (89 de costes directos y 130 en costes indirectos de morbilidad y mortalidad[25]. El coste se distribuyó de la siguiente manera: - Enfermedad coronaria : 156.4 billones de dólares- ACV: 65,5 billones de dólares- Hipertensión arterial: 69,4 billones de dólares - Insuficiencia cardiaca: 34,8 billones de dólares Además, en los costes hay que añadir las secuelas; el coste de un accidente cerebrovascular a lo largo de toda la vida de la persona es de 140.048 dólares, incluyendo ingresos hospitalarios, rehabilitación, y seguimiento de las secuelas[26]. Figura 7. Causas de mortalidad a nivel mundial en 2004. En la Unión Europea, el coste de las enfermedades cardiovasculares en 2004 fue de 169 billones de euros, de los que el 62% fueron costes sanitarios. Las pérdidas de productividad y cuidados informales representaron 21% y 17% de los costes, respectivamente. La cardiopatía isquémica representó el 27% y las enfermedades cerebrovasculares 20% del coste global de la enfermedad cardiovascular.

Enfermedades Infecciosas

Las enfermedades infecciosas han experimentado un importante retroceso como causa de morbilidad. Sin embargo, dentro de las enfermedades infecciosas, la disminución de la mortalidad del SIDA en países desarrollados, ha condicionado un aumento gradual del número de casos en los últimos años (ver ejemplo de USA, Tabla 3, y figura 8).Tabla 3. Casos de SIDA anuales y acumulados y mortalidad en Estados Unidos entre 2002-2006 (para 50 estados americanos y el distrito de Columbia).

Figura 8. Casos, muertes y prevalencia de SIDA en Estados Unidos desde 1985 hasta 2006 (fuente: CDC).

Cáncer

En el año 2008 el Nacional Institutes of Health norteamericano estimó el coste anual total del cáncer en 2007 en 219.2 billones de dólares, de los que 89 fueron costes directos sanitarios, 18,2 fueron costes de productividad por enfermedad, y 112 costes de productividad por muerte prematura[27].

Diabetes

La diabetes mellitus se considera actualmente uno de los principales problemas de salud a nivel mundial y su repercusión socioeconómica es muy importante. Se estima que afecta entre 60 y 100 millones de personas en el mundo y es la tercera causa de muerte, después del cáncer y del infarto del miocardio[28]. El coste del tratamiento de la diabetes está aumentando debido al aumento en la prevalencia de la enfermedad, en relación con los estilos de vida y obesidad. Es una de las que más caras resultan a la sociedad, por la mortalidad temprana, invalidez laboral y costos generados por sus complicaciones y su tratamiento. Las hospitalizaciones por motivos urgentes son 4 veces más frecuentes en diabéticos que en la población en general, aunque podrían evitarse muchos ingresos con una educación adecuada[29]. El coste anual ocasionado en Estados Unidos por la diabetes en 2007 fue de aproximadamente 174 billones de dólares: 116 en gastos médicos (27 en control diabetes, 58 en complicaciones crónicas, y 31 en costes médicos generales). Los costes indirectos supusieron 58 billones. Desde el año 2002 se ha producido un incrementeo en 42 billones de dólares, lo que supone un 32% de incremento. El coste en 2007 de los cuidados sanitarios de las personas con diabetes fue de 11,744 dólares, de los que 6.649 son atribuibles a la diabetes exclusivamente. Uno de cada 5 dólares sanitarios se gasta en el cuidado de personas con diabetes[30].

Enfermedades respiratorias crónicas

El asma y la enfermedad pulmonar obstructiva crónica (EPOC) son las dos enfermedades respiratorias crónicas más prevalentes, causando un coste sanitario elevado. En el año 2000, la EPOC fue la quinta causa de muerte a nivel mundial[31]. Se espera que la mortalidad por EPOC aumente hasta convertirse en la tercera causa de muerte en el año 2020. Se predice que la enfermedad será la quinta causa de discapacidad en el 2020. La prevalencia en España está entre el 1% al 15% en asma1,2 y y en torno al 9% la EPOC en adultos de entre 40 y 70 años. En países desarrollados, los costes derivados del asma son responsables de entre el 1 y 2% del gasto sanitario público[32]. La situación es peor en la EPOC, que genera un coste de hasta el 2% del gasto sanitario público en España y 0,25% del Producto Interior Bruto[33]. La EPOC afecta a 15 millones de personas en Estados Unidos y el gasto total anual es de 6,6 billones de dólares, de los un tercio, 2,3 billones, son debidos al coste de oxigenoterapia crónica, un cuarto se debe a hospitalización y servicios médicos durante el ingreso (1,9 billones), y un séptic (942 millones) se deben a estancias en residencias asistidas. Otros gastos se producen en visitas médicas ambulatorias (480 millones), medicaciones (462 millones), cuidado sanitari domiciliario (309 millones), visitas a urgencias (148 millones), procedimiento diagnósticos ambulatorios (55 millones) y cuidados de hospicio (28 millones)[34].

Enfermedades reumáticas

Las enfermedades músculo-esqueléticas son una carga importante para los individuos y las sociedades en general. La incidencia de artrosis es al menos 10 veces superior a la de artritis reumatoide. Las enfermedades reumáticas afectan con mucha mayor frecuencia a mujeres y aumenta con la edad. Con el aumento de la expectativa de vida, la prevalencia de estas enfermedades probablemente también aumentará. Una quinta parte de todas las demandas de incapacidad en Gran Bretaña son causadas por enfermedades del sistema músculo-esquelético. Los costes combinados de la artritis reumatoide alcanzan las 7000 libras esterlinas por persona y año, mientras que cada reemplazo protésico de rodilla o cadera, cuesta una media de 5000 libras esterlinas[35]. Las enfermedades reumáticas generan un gran volumen de consultas médicas. En 2004, el 11,5% de las consultas a médicos de atención primaria en Inglaterra y Gales fueron por afectación del sistema músculo-esquelético y enfermedades del tejido conectivo[36]. El coste basal y anual de la artritis reumatoide y la artrosis es, según algunos estudios, 9300 dólares, y 5700, respectivamente[37].

Enfermedades mentales y demencia

Los trastornos mentales afectan a todas las sociedades y países, edades, géneros, estratos sociales, y afectan a más del 25% de la población a lo largo de su vida. La prevalencia de los trastornos mentales y del comportamiento es del 10% en la población adulta. El 20% de los pacientes atendidos por médicos de atención primaria tienen uno o más trastornos mentales. Una de cada 4 familias tiene al menos un miembro con un trastorno mental o del comportamiento. Estas familias sufren el impacto negativo de la enfermedad de forma intensa, además de la carga de estigma y la discriminación que frecuentemente acompaña a estas enfermedades. Los costes económicos de oportunidad de las personas que padecen estas familiares y sus familiares son incalculables. En 1990, las enfermedades mentales y neurológicas causaron el 10% de la pérdida de años de vida ajustados por calidad (AVAC) por enfermedad o heridas. Esto aumentó al 12% en el año 2000, y se espera que se incremente al 15% en el 2020. En el año 2004 la depresión fue la tercera causa de pérdida de ACVC. Los trastornos mentales que causan discapacidad con más frecuencia son la depresión, el abuso de sustancias, la esquizofrenia, la epilepsia, la enfermedad de Alzheimer, el retraso mental y los trastornos de la infancia y adolescencia. El impacto económico de la enfermedad mental es amplio, intenso y duradero. Un elemento diferenciador de otras enfermedades es la mayor intensidad de otros costes, como la pérdida de empleo, el impacto sobre familiares y cuidadores, la incidencia de conductas delictivas, y el riesgo para la seguridad pública. Algunos estudios estiman el coste de la enfermedad mental como el 2,5% del producto interior bruto (Rice et al. 1990). En Europa, varios estudios han estimado el gasto en enfermedad mental como porcentaje del gasto sanitario total: 23,2% en Holanda (Meerding et al. 1998). En Inglaterra, sólo el coste de los ingresos supuso el 22% del coste sanitario total (Patel & Knapp 1998). En los países con mala cobertura sanitaria puede parecer que el coste de la enfermedad es bajo, ya que no hay gasto sanitario. Sin embargo, en estos países, las repercusiones en productividad son mucho mayores. El coste anual de los cuidados de un paciente con enfermedad de Alzheimer es de 9.451 dólares para enfermedad leve hasta 36.947 dólares para enfermedad avanzada[38]^{, [39]}.